En aquellos años, yo me preocupaba por no tener novia, siendo que mis amigos de mi edad, -18 años- las tenían. Iba a bailar y cada baile era contabilizado por mi. Como si fuera un estadístico. Ja!. Para mi, no era nada bueno, no tener una novia. Bue!. Eran las cosas de mi vida. ¡Cómo si hubiera sido una obligación!. No me interesaba tanto, tener relaciones sexuales. Pero sí, una novia. A la vez, me preocupaba por algunas cargadas acerca del sexo,que me hacían. Aunque todo eso lo sedimentaba, con mi estudio permanente. Eso sí, por haber caído en una crisis, me sentía señalado todo el tiempo por mi ciudad natal-San Martín- como un tipo raro, y loquito. Extraño. Pero ¡eso era!. ¿Y qué?. 40 años después, lo sé perfectamente, y es un orgullo sobresaliente.
Entonces, empezaba a trabajar como dactilógrafo-me había recibido, muy bien, en un curso, de la vuelta de mi casa- en el laboratorio de mi padre. Era bioquímico. Y debía hacer los informes todas las mañanas, para los pacientes. En eso estaba un día de la mitad de 1977. Creo que fue, mayo. Vienen cuatro chicas.
--Hola!...queríamos ver algo de biología...¿no tienes un microscopio?...
--Si, pasen.
Entran las cuatro. Una de ellas, es Adriana. Esta chica de quince años-yo, tenía, 18- solía pasar por la vereda, para ir al colegio, y me había empezado a saludar. Luego de hablar con ellas, y mostrarle algo con el microscopio, hablo con Adriana. Y la próxima vez que hacía su recorrido al colegio, la paro, y la acompaño hasta una esquina. Después, otra vez. Y otra. Y otra. Vino el primer beso. Y algunas salidas a tomar helado. En agosto, de ese año, acompaño de la misma manera, a Silvia. Del colegio secundario. Yo, había salido ya del quinto año. Silvia es la primera. Le gana a Adriana. Pues, mientras sólo acompañaba a Adriana, a Silvia la empiezo a visitar como novio oficial. ¡Qué antiguo, eso de "oficial"!. Viajo a Palmira, una ciudad a 8 kms de San Martin. ¡Había logrado lo que quería!. La visitaba como era en aquellos años, martes, jueves, sábados y domingos. ¿Se acuerdan?. Todos decíamos "¿vas a firmar"?. Jaa!. Y llevábámos el bolígrafo,siempre listo. Pero ¡sin tinta!.Ja! Me quedaba unas dos o tres horas, y tomaba el micro. Me acuerdo que mientras esperaba el colectivo, en la esquina había un buzón(¿saben todavía lo que es esto?:..jaa!). Arriba de éste, escribo con polvo de la calle, "Silvia"...¡qué lindo!. Estuve visitándola, seis meses. Luego, la dejo. No sé porqué. La verdad. Me parece que fue por Adriana, ya que durante un mes, hice una "simultánea de ajedrez": andaba con las dos. Pero léase bien: no la engañaba a Silvia. Adriana era sólo una compañía. Ésta se entera que yo no le dije de mi crisis mental. entonces,me escribe una carta, y me deja. Yo, me entristezco, porque me dijo en la cara que yo "era un loco". Las dejo a las dos. En la casa de Silvia, le cuento que no la quiero más, fiel a mi mal estado de ser. Y entonces, pienso de nuevo en ingeniería electrónica. Para el año de 1978, hago el pre-universitario, y de vuelta, los transistores,pueden mas que las minas. Silvia, no quedó bien con mi escapada. Se sentía mal. Yo no supe -hasta hoy no lo sé-porque la dejé. Pero en fin...
"El que muere sin dejar de ser, alcanza la inmortalidad".
"La verdad es una tierra sin caminos". Jiddu Krishnamurti.
"Se cauto. Esfuérzate por ser feliz" El Desiderata.
"Si es tan natural hacer el amor. ¿Por qué hay tantos libros que indican cómo hacerlo?. "
"Comprender, amar y ser humilde. Mis tres puntos importantes para la felicidad". (Escrito por mi)
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