Su chiste en el secundario era mirar a un rincón de la explanada, en el patio del aula del primer piso, y decir:
--¡Cuidado!...¡no lo pisés!....
Todos se reunían a ver, y claro, no había nada. Jaa!.
Y las cargadas a los narigones. A los gordos. A los petisos. Se puede entender, y además, se divierten todos. Pero no es lo mismo,las agresiones, y roturas de cosas.
Mi amigo en el colegio era Raúl. Nervioso. Me llevaba el apunte con mis temas de ovnis y cuestiones profundas desde lo intelectual. Con él, nos llevamos inglés y tuvimos que dar una conferencia sobre el caso Watergate, de 1974, en los Estados Unidos.La preparamos, y nos sacamos un 10. Fue muy bien explicada. Por ambos. Buscamos material de la revista Reader' s Digest.
Otro amigo,fue y es, Armando Zandanel. Con él, dimos unas charlas sobre Imperio Incaico en los años de 1976 y 1977. Yo fui más bien gestor de esas charlas, porque las dio él. Mi padre nos llevaba con las diapostivas a las escuelas. ¡Como productores de cine científico!. De ese talante y en aquella época. Claro.
Con entusiasmo. Charlabamos de ovnis y astronomía. Y jugábamos al truco con otro de los amigos de aquella época, Roberto. También investigador de ovnis. Martín, fue otro amigo. Tenía un telescopio, que, años depués, me prestaría por tres años. Él, era también paciente psiquiatrico. Nos entendíamos muy bien, hasta que después, la amistad se cayó.
Tuve amigos, eh. No me puedo quejar. Porque siempre fui cálido. Afable. Simpático. Con ideas. Con espontaneidad y alegría. A pesar de todo, como diría mi amigo de estos años,Jorge Sosa, el humorista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario