Translate

lunes, 1 de julio de 2013

1975.

En este época, ya llevaba un año de tratamiento psiquiátrico. Alguien había dicho que hubiera sido mejor un psicólogo. Quizás debido a que no se necesitaban psicofármacos. Con un tratamiento que hubiese apuntado directamente al mal trato en el colegio, todo podría haber sido mejor. En fin.
El médico que me atendía, el cual me recetó pastillas en demasía, lo cual  provocó una artritis medicamentosa, se fue de San Martín, Mendoza, y fui derivado a otro psiquiatra. Fue peor el tipo. Si, ya que me hizo un coma insulínico. Esto es, llevarme  al borde de la muerte, para provocar no sé qué. Una barbaridad. Me daba todo dulce, y me inyectaban insulina, o algo así. Esto fue -como me lo dijeron una vez- ser un conejillo de Indias. Hoy pienso que si ha servido para experimentar acerca de cómo tratar problemas "mentales"(después verán porque lo he puesto entre comillas) y así, verificar o analizar otros casos, puede ser importante. Y si no, fui o soy un héroe. Anónimo, pero héroe al fin. ¿No?. Me faltaban darme un poco de lubricante para frenos...ja!. Total, paga la casa. Fue un año difícil, como serían los sucesivos. Sin embargo, leí mucho sobre ovnis, y eso me compensaba. El bulling, continuaba. Un poco más atenuado. Los compañeros que fueron tan duros conmigo, habían abandonado. Como yo. Porque en ese año, hice por segunda vez,el cuarto año,luego de haberlo dejado, por mi primera crisis. La del grito. Aconsejado por mi madre. En 1975,repito el año pero no me llevo ninguna. Toda una hazaña. Casi era el mejor del curso. Me preguntaban todo. Ese año me voy al sur de Mendoza, con mi primo Alberto a investigar un caso ovni. Tenía 16 años. Paso una semana, allá, en San Rafaél, y hago un camping, con mi primo. Estamos al borde de un río, con una carpa, por cinco días. Solos. Sin nadie. Algún venado, o liebre. Algunos cerros, o montañas bajas. Tomábamos grandes vasos de leche. Caminábamos. Escalábamos. Sacamos fotos. Muy hermoso el verano de 1975. Ahí estuve, en el Nihuil II, cerca de  la represa. Y en San Rafaél, coleccionábamos los recortes de ovnis, con algunas ideas, las cuales no se llevan a la  práctica, debido a que Alberto, se retira prematuramente de la ovnilogía, para empezar a estudiar Medicina. Sigo solo. Pero ya como corresponsal de un grupo de estudios científicos y ovnis,de Chivilcoy, en la pcia de Bs As. Conozco por carta, a  Armando Zandanel. Hoy, profesor de física,matemáticas  y astronomía. Gran amigo. Comienza una etapa bella del estudio de ovnis y ciencias. Las cartas que recibía tenían un promedio de diez a quince ...por semana! Respondía al toque. Sin demoras. Centros de estudio de todo el país. Cadiu, Paz-Zenit, Ipri, del Perú(de Sixto Paz Welles), Onife, etc..etc...Los ovnis me consumian horas y horas de mi vida. Recortes, análisis, fotos, pegatinas, cuadros sinópticos, dibujos, catálogos, etc..etc...Una obsesión, sin embargo, agradable. Iba a conferencias. La primera fue el 16 de agosto de 1973, en el cine de aquel año, Cóndor. ¿El disertante? Fabio Zerpa. La segunda, Enrique Mancini, teatro Indendencia, capital de Mendoza. Con un amigo de aquel año, aficionado también a los ovnis y la astronomia, fuimos con un grabador de cinta. No nos dejó entrar el tipo. ¿Habrá creido que eramos de la Cia?. Ja!. ¿U hombres de negro?. Vestiamos a la moda, pero no de negro.Ja! Un año pletórico de anécdotas, ideas y actividades ovnis y afines.

No hay comentarios:

Publicar un comentario